La gran ruleta REDD
Ahora que hay variedad de proyectos REDD y de preparación para REDD que ya hace algún tiempo se vienen implementando, podemos ver que, tal como predijo Amigos de la Tierra Internacional y otras organizaciones y movimientos de la sociedad civil, REDD es una solución falsa y riesgosa para el cambio climático, tanto en la teoría como en la práctica. Ya hay algunos ejemplos notorios de la vida real que demuestran que los proyectos REDD facilitan, en lugar de evitar el uso continuado de combustibles fósiles; exacerban los conflictos de tierras y las tensiones en torno a los derechos sobre los recursos; afectan bastante negativamente a los Pueblos Indígenas y comunidades locales que dependen de los bosques; ponen en riesgo la seguridad alimentaria, y son incluso una amenaza para los bosques. Algunos proyectos REDD también han enfrentado grandes dificultades financieras, derrochando cuantiosos fondos públicos.
En este breve informe analizaremos tres estudios de caso específicos, pero ya hay numerosos ejemplos de “cuando REDD no funciona”. Seleccionamos el Proyecto Piloto de N’hambita en Mozambique, la Asociación para los Bosques y el Clima de Kalimantan (KFCP) en Indonesia y la implementación de REDD+ en Perú, ya que son tres casos que exhiben una amplia gama de problemas y preocupaciones con respecto a REDD.